Pero que raro...

-Que raro que un nene venga para este lado!! No? -Dijo el empleado de una conocida juguetería platense.
-Noo, lo raro es que aún haya jugueterías que sigan dividiendo entre juguetes de nene y de nenas... No te parece?  Dijo, valiente y orgullosamente la mamá de Simón,  mientras este se disponía a elegir entre un pony rosa u otro violeta.
Ojos desorbitados del empleado sin saber que responder.  A veces las palabras abundan y el silencio interpreta lo que sobrevuela el ambiente. Quizás, si quiere y se atreve, esta persona tenga la posibilidad de reflexionar que atrás de ese fuego que lentamente se empieza a extinguir hay otro que con esperanza y mucho amor comienza a sustituirlo.
Soñamos -y queremos compartirlo con muchos otros padres- con dejarle una sociedad mas inclusiva, diversa y fraternal, por el bien de ellos y de toda la humanidad...



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