Fuerza Mapuches!

“Cuando vinieron ellos tenían la biblia y nosotros la tierra. Nos dijeron, cierren los ojos y recen. Cuando abrimos los ojos nosotros teníamos la biblia ellos tenían la tierra” E. Galeano

No podrán, ni siquiera repitiendo la matanza de las 20.000 almas que hoy viven en la memoria de todos aquellos que creemos que esas tierras les pertenecen por derechos ancestrales, derechos que tienen incluso desde antes que exista la misma propiedad privada.

Lo que sufren los Mapuches no son problemas distintos a los que el MO.CA.SE viene defendiendo en Santiago del Estero, o los QOM en el chaco entre otros grupos o pueblos originarios por esta parte del Sur del Continente. Esas tierras les pertenecen desde antes que en nombre de Dios, un grupo de despiadados piratas desembarcaran en el no tan nuevo continente, cambiando mano a mano nuestros recursos naturales por hambre y enfermedades. Pero eso sí, amparado bajo el paraguas del desarrollo, del mundo civilizado.
Ese famoso desarrollo que un día trajeron bajo el brazo no es mas que la apropiación de los recursos, incluso sin atender a su agotamiento, solo al servicio de generar "riquezas" y ya no con la concepción que estas colectividades tienen del entorno que los rodea, donde se valoraba a la pachamama, se la contemplaba, de ella se tomaba solo lo que se necesitaba y no más, cuidaban los arboles y la biodiversidad. Digamos que vivían en paz, hasta que los empujaron a quebrar esa armoniosa comunión con la madre naturaleza.
Hoy esos piratas que vinieron en barco tienen cara de poderosos empresarios, y se manejan por la vida comprando voluntades, creyendo que con dinero todo lo pueden.
Intento reflejar, en la poesía del final, algunos de estos lamentables sucesos que este pueblo originario de nuestra América viene teniendo que soportar. Su cultura en general ha sido vapuleada de manera ininterrumpida, hasta un presente que no resulta ser de lo más auspicioso.
El poder económico en estrecha comunión con el poder político y judicial hacen estragos contra un grupo que solo sabe de resistencia.
Ellos luchan por la subsistencia en el tiempo de sus costumbres, sus intereses, sus rituales, su autodeterminación. Se oponen a la extranjerización de la tierra y más si es que las mismas se venden con ellos adentro. Fuerza hermanos, no están solos...

Suelo,  sueño, y dueño se escriben casi igual, no se puede negar.

Para ellos que un "dueño" les niegue el suelo les quita el sueño y ya nada es igual.

Es negarlos a ellos, es negar su identidad,  ellos son la tierra misma hasta por definición

Con sus manos las trabajaron
con sus cuerpos enterrados la abonaron

con las lágrimas de sus ancestros crearon los ríos que bajan de la montaña

 sin piedad a la exclusión y el hambre los condenaron

Querian el Lemu* a cualquier precio siendo que nunca estuvo en venta,

El aire puro, los frondosos árboles y los lagos cristalinos,
no pueden comprarse

el suelo, el sol, la luna, la lluvia y los vientos,
de dinero no conocen.

No pudieron en un pasado aun no olvidado

escribir su nombre en la roca del desierto

No podrán con su cultura, que es la nuestra,
ni con la dignidad de un pueblo hermano

que vive en la memoria del mapuche Inacayal* 

quien durmió el sueño de los justos
en un frío museo platense.

El problema  no son sus tierras sino la desmedida ambición de los poderosos

Si todos necesitamos de la misma cantidad de aire para vivir

porque algunos quieren más del suficiente 

sofocando al que mira de abajo o apunado bien de arriba 

No podrán -ni con opresión- callar a un pueblo que nació gritando

No podrán con el poder de los Machi* 

capaces ellos de hacer los realidad sueños.

Referencias
*Lemu: Selva, bosque en idioma mapuche o mapudungun.
*Inacayal: Cacique mapuche secuestrado y trasladado vivo para ser exhibido en el museo de La Plata tras lo que se denomino la Conquista del Desierto
*Machi: Principal figura médica, religiosa, consejera y protectora del pueblo mapuche.