Una lección de amor

Días atrás Simón se encontró, cuando hacíamos unos mandados, un perrito Caniche Toy. Era claro que estaba asustado y perdido de sus dueños, por lo que no dudamos en tomarlo de la correa e inmediatamente nos pusimos a buscar a quien seguramente lo estaba ya extrañando. 
Fue, ese sábado, un día muy largo, donde no podíamos salir del asombro de lo que estábamos viviendo. Simón estaba como loco con este Caniche que ni nombre tenia aun, lógicamente tenia aunque no lo sabíamos. Comenzamos la búsqueda, preguntamos por el barrio, mientras tanto mucha gente prestaba su colaboración, utilizando las redes sociales para que esta mascota pueda volver a su casa y así fue que esa misma noche justo antes de dormir, felizmente apareció la dueña de TOTIM. Coordinamos para el día siguiente hacer el reencuentro. Es indescriptible la felicidad de Teresa De Jesús Soler al ver a su perro, también por parte de la mascota, de todos, de todos menos de Simón que ya se sentía dueño.
Pero siempre que uno hace el bien lo bueno llega luego, y aunque eso no debe ser el combustible de nuestras acciones sepan que eso siempre es así. La vida siempre reconforta las buenas acciones y esta no sería la excepción, al contrario esta mujer ha incluso hasta sobre valorado la decisión que hemos tomado de buscar primero y entregar luego, desinteresadamente a su mascota. Regalos varios, lindas charlas, cosas en común y hasta algún almuerzo que bien podría ser el comienzo de una hermosa relación.
Teresa nos dijo: “Me dieron una lección de amor” pero no se quedo con eso sino que nos canto vale 4 a nuestro gesto y como frutilla del postre, y siendo que no era necesario le regalo a Simón la posibilidad de crecer junto a una mascotita. Llamar a esto final feliz es poco, sobretodo porque no es un final de nada sino un maravilloso comienzo.
Gracias Teresa por regalarnos esta alegría, y al universo por regalarnos la posibilidad de haberte conocido.