YO LO ELIJO...



Para mi cumpleaños uno de mis deseos ya lo tengo ocupado, por lo mismo al llegar los días lindos mirare el cielo durante horas esperando ver algún meteorito caer, deseando fervientemente que el dólar valga solo centavitos y lograr así que todos aquellos, oficialistas o no que salieron, salen y saldrán corriendo despavoridos hacia cualquier cueva a comprar esas divisas pierdan sus ahorros por avarientos.
No es de malo ni de jodido, sino que en quienes estoy ahora pensando no son justamente los que todos los días entran a la AFIP para ver cuantos dólares les autorizaban, sino aquellos por los que aun falta seguir trabajando, aun hay gente que no tiene un techo, que pasa hambre, que no tiene la oportunidad de comer diariamente, niños en la calle, y un montón mas de postergaciones increíbles de problemas reales e innegables y que para mí (y es mi opinión) es más importante, mucho mas importante que cuanto puedo ahorrar mes a mes por si me llegare a pasar algo, porque el “por si me llegara” no forma parte nunca del conjunto de problemas reales.
Yo mucho de economía no sé, no se cual es la relación y quizás alguien pueda explicarme cuan influyente es para la macro o micro economía la compra de dólares de los pequeños ahorristas, lo que si se es que simbólica o representativamente son lo mismo que quienes diariamente pujan para la desestabilización de la economía, los grupos concentrados de poder, las cerealeras, las importadoras, los buitresentre otros. Para que compraría dólares sino es para estar deseando que se devalúe el peso, para comprar pesos a un valor y venderlos a un precio mayor, es ahorrar a costilla de la exclusión, de la pobreza y la miseria. Si ese que compra 200 mugrosos dólares mensuales tuviera la posibilidad de comprar todos los dólares del Banco Central lo haría? La respuesta es casi obvia, se cae de madura.
Yo elijo a mi país, yo elijo postergar  lo que en hipótesis podría ganar si a mi país le va mal, yo elijo “tener menos”, si, asi es, elijo tener menos pero dormir sin la culpa ni la hipocresía de estar pensando en mi antes que en el projimo, yo quiero que todos estén bien y si para eso debo esforzarme, con gusto YO LO ELIJO.